En los proyectos de arquitectura, la calidad gráfica de los planos no solo radica en su precisión geométrica, sino también en la legibilidad del texto. Cotas, notas, títulos, etiquetas y especificaciones deben estar correctamente dimensionados para ser interpretados sin ambigüedades, independientemente del formato de plano o la escala de impresión. La utilización inadecuada de estilos de texto o la falta de correspondencia entre la altura del texto y la escala de representación puede generar errores costosos en obra, duplicidad de esfuerzos en revisiones, e incluso incumplimientos normativos. En este contexto, progeCAD ofrece herramientas que permiten controlar eficazmente la altura y formato del texto, adaptándose a escalas variables y requisitos gráficos. Comprender cómo funciona esta gestión, y cómo optimizarla según las normativas técnicas, es clave para una documentación técnica coherente, limpia y profesional. Principios básicos: escalas, unidades y tamaño en papel Dibujar en CAD implica trabajar siempre en «tamaño real», es decir, en unidades que representan las dimensiones reales del objeto (metros, milímetros, pies, etc.). Sin embargo, al imprimir o publicar los planos, es necesario aplicar una escala de impresión que reduzca o amplíe el dibujo para que encaje en el formato deseado. Esto introduce una cuestión fundamental: ¿Cómo determinar la altura del texto en el modelo para que se vea correctamente en el papel? La respuesta se basa en una fórmula simple pero esencial: Altura en modelo=Altura deseada en papel (mm)×Escala / 1000 Así, si queremos que un texto se vea con 2.5 mm de altura en papel y trabajamos a escala 1:50, la altura en el modelo será de 2.5×50/1000=0.125 unidades Este cálculo se realiza manualmente en muchos casos, pero también puede automatizarse mediante hojas de cálculo o scripts, como veremos más adelante. La clave es tener claro que, en textos no anotativos, la escala debe aplicarse de forma explícita al definir la altura del texto. Normativa aplicable: estándares de presentación La norma internacional ISO 3098 (partes 0 y 5) establece las bases para la correcta escritura técnica en planos. Define alturas normalizadas —1.8, 2.5, 3.5, 5, 7, 10, 14 y 20 mm— y criterios de trazado, espaciado y proporción del texto. Su objetivo es garantizar la legibilidad incluso en formatos pequeños o en copias impresas. En función del tamaño del plano y la distancia habitual de lectura (60–70 cm), se recomienda que los textos más pequeños (como cotas o referencias) no sean inferiores a 2.5 mm, mientras que los títulos o encabezados pueden oscilar entre 5 y 7 mm. Aplicar estas recomendaciones permite no solo cumplir con los estándares, sino también facilitar el trabajo de lectura tanto en oficina técnica como en obra. Muchos profesionales subestiman la relevancia de la norma ISO 3098, confiando en configuraciones visuales “a ojo”. Sin embargo, una correcta interpretación de esta norma evita inconsistencias y mejora significativamente la calidad de presentación. Texto anotativo y no anotativo: ventajas y aplicación práctica Una de las decisiones clave en progeCAD es optar por el uso de texto anotativo frente al no anotativo. En el caso del texto anotativo, el texto se adapta automáticamente a las distintas escalas del plano, manteniendo una altura constante en papel. Esto es especialmente útil cuando se trabaja con presentaciones con varias ventanas gráficas a distintas escalas, como una planta general a 1:100 y detalles a 1:20 o 1:10. Los estilos anotativos permiten asignar múltiples escalas de visualización a un mismo objeto, facilitando su visibilidad y correcta representación. El texto no anotativo, en cambio, requiere que el usuario calcule manualmente la altura para cada escala. Aunque este método ofrece un control más preciso, implica mayor dedicación y riesgo de error cuando se gestionan muchas escalas o se producen cambios en el proyecto. Una práctica recomendada es combinar ambos sistemas: utilizar texto anotativo para etiquetas, cotas y símbolos comunes, y reservar el texto no anotativo para casos especiales o detalles que requieren control milimétrico. Esta estrategia híbrida ofrece flexibilidad sin renunciar a la eficiencia. Herramientas de automatización: hojas de cálculo y scripts La automatización del cálculo de altura de texto es una herramienta valiosa para estudios técnicos, especialmente cuando se manejan múltiples escalas o se trabaja en equipo. Una hoja de cálculo sencilla, que relacione las alturas en papel deseadas con las escalas de dibujo más habituales (1:10, 1:20, 1:50, 1:100, etc.), permite obtener rápidamente el valor exacto que debe introducirse como altura en el modelo. Tamaños de texto por escala: Escala Texto normal Texto destacado Subtítulo Título 1:10 0,60 0,75 0,90 1,00 1:20 0,30 0,38 0,45 0,50 1:25 0,24 0,30 0,36 0,40 1:50 0,12 0,15 0,18 0,20 1:75 0,08 0,10 0,12 0,14 1:100 0,06 0,075 0,09 0,10 1:200 0,03 0,038 0,045 0,050 1:250 0,024 0,030 0,036 0,040 1:500 0,012 0,015 0,018 0,020 1:1000 0,006 0,0075 0,009 0,010 1:2000 0,003 0,0038 0,0045 0,005 Además, progeCAD permite utilizar scripts en LISP o VBA para establecer TEXTSIZE, aplicar estilos de texto predeterminados o actualizar automáticamente objetos según la escala del layout activo. Esto no solo ahorra tiempo, sino que asegura coherencia y reduce el margen de error en proyectos grandes o colaborativos. Por ejemplo, un script puede recorrer todos los textos del dibujo, verificar su altura real en relación con la escala de impresión y generar un informe con las inconsistencias detectadas. Esta verificación sistemática refuerza la trazabilidad y la calidad del proyecto. Aplicación para un caso real: plano arquitectónico a escala 1:50 Para ilustrar el proceso, se aplicó esta metodología en un proyecto real: la planta de distribución de una vivienda unifamiliar, representada a escala 1:50. Se definieron tres estilos de texto no anotativo, con alturas en el modelo de 0.10, 0.125 y 0.25 unidades, correspondientes a 2 mm, 2.5 mm y 5 mm en papel, respectivamente. Además, se implementó un estilo anotativo para etiquetas de espacios y materiales, con una altura de 3.5 mm en papel, válido tanto en vistas generales (1:50) como en detalles a 1:10. Se realizaron pruebas de impresión a escala real en formato A3, verificando la legibilidad a distancia estándar. Tras pequeños ajustes, el resultado fue una representación jerárquica clara, con excelente contraste y sin